La pandemia COVID ha cambiado muchos de los aspectos de la fuerza del trabajo, seguramente nos estemos moviendo más rápido de lo esperado desde el trabajo presencial al teletrabajo.
Puede parecer que teletrabajar sea algo sencillo, desde tu casa puedes realizar tu actividad laboral, pero no es tan simple.
Las empresas se están dando cuenta, que para teletrabajar se requieren ciertas habilidades para hacerlo con éxito.
Los centros de formación están implantando programas formativos donde se enseñan aspectos técnicos para teletrabajar, así como habilidades psicosociales para organizar el trabajo y gestionar equipos.
Vamos a analizar las habilidades que se suelen dar en un curso de teletrabajo y gestión de recursos humanos.
Habilidades para teletrabajar
Habilidad gestión de calidad ISO.
El trabajo presencial se rige por las normas ISO, que permite que toda la actividad de la empresa tenga altos estándares de calidad, por lo tanto el teletrabajo debe regirse también por esta normativa.
Es recomendable que los trabajadores manejen estas normas, al menos la norma ISO 9001, que podríamos definir como la primera norma de la calidad de cualquier empresa.
Por lo tanto, es aconsejable formar a los trabajadores en un curso de control de calidad , para que realicen adecuadamente sus acciones de teletrabajo bajo el prisma de calidad ISO.
Habilidades de resolución de problemas.
Es más fácil ayudar a alguien cuando está sentado a tu lado, que cuando está sentado en un escritorio a miles de kilómetros de distancia.
Es importante dotar a los trabajadores de habilidades e iniciativa para tratar de arreglar las cosas por sí mismos. Esta habilidad permitirá reducir los costes de mantenimiento, exigiendo menos tiempo y esfuerzo a los demás.
Habilidades de emprendimiento y liderazgo pueden ser óptimas para reforzar este aspecto.
Habilidades técnicas.
Los teletrabajadores también deben poseer conocimientos técnicos. Los equipos remotos dependen de la tecnología para su funcionamiento y mantenimiento.
Si estás interesado en teletrabajar, puedo garantizarte que vas a depender en gran medida de la tecnología.
Muchas empresas grandes tienen un departamento de Nuevas Tecnologías para ayudarte a prepararte técnicamente para el teletrabajo.
Cuando eres un teletrabajador, es probable que seas tu propio informático, por lo que es imprescindible que te sientas cómodo con la tecnología.
Es recomendable tener conocimientos de hardware, sistema operativo y en particular para la instalación de dispositivos remotos como puede ser una red wifi, impresora o conexión a internet.
Habilidades de comunicación.
En un entorno de oficina presencial la comunicación no verbal funciona bastante bien. Si alguien dice: “Sí, lo entiendo”, pero su cara se ve insegura, es justo asumir que las cosas aún no están claras.
No se obtienen estas señales no verbales en el teletrabajo.
Incluso si utilizas soluciones de colaboración en vídeo, aunque sean útiles, no recibes todas las indicaciones no verbales como lo harías en persona.
Como trabajador a distancia, debes ser capaz de comunicarte claramente en todo momento.
Si no puedes hacerlo, estás dejando a muchos de los miembros de tu equipo a oscuras, obligándoles a adivinar y a hacer suposiciones.
Cuando intentas mantener un equipo fuerte, no puedes permitirte fallos en la comunicación.
Es importante tener formación en comunicación cuando tenemos que instalar un proyecto de teletrabajo, este punto se suele olvidar y muchas veces es el causante de que estos proyectos fracasen.
Es bueno que sepa manejarse en las redes sociales como si fuera un Community Manager, pero ojo no cometa los errores o pecados más típicos de este profesional.
Habilidades de administración del tiempo.
Lo bueno del teletrabajo es que tienes un control total sobre tu horario.
Cada día es tuyo. Nadie está ahí para monitorear tu actividad. Los teletrabajadores son responsables de gestionar todo su día, lo que requiere mucha autodisciplina.
Los horarios de los teletrabajadores no siempre son tan claros. La línea entre la vida personal y la vida laboral puede ser borrosa.
Muchos teletrabajadores tienen dificultades para administrar su tiempo.
A menudo subestiman el tiempo que les llevará completar una tarea o se sobrecargan de tareas.
Los resultados incluyen agotamiento, incumplimiento de plazos, disminución de la moral, pérdida de credibilidad y, en algunos casos, despido.
Los teletrabajadores que dividen su tiempo entre el hogar y la oficina pueden beneficiarse guardando proyectos más grandes para los días de teletrabajo, lo que evita que se sientan abrumados en la oficina.
Trabajar en pequeños franjas horarias y recompensarse también ayuda.
Por ejemplo, decir, “Voy a trabajar en esto durante 30 minutos más y luego tomar un descanso”.
Los recordatorios audibles y visuales de los calendarios y dispositivos electrónicos también ayudan.
Como teletrabajador, necesitas ser capaz de tomar control sobre tu tiempo y tu horario. Esto puede parecer muy simple, pero puede ser difícil si te distraes fácilmente cuando nadie está mirando.
Un teletrabajador exitoso puede decir “no” a las distracciones, mantenerse en la tarea y presupuestar el tiempo para una máxima productividad. Si no puedes hacer eso, sería bueno tomar alguna formación relacionada con la gestión del tiempo y control de proyectos.
Habilidades de colaboración.
Los teletrabajadores trabajan de forma muy independiente, ya que la mayoría de las veces están solos.
Pero debemos tener en cuenta que el teletrabajador forma parte de un equipo más grande, que tiene un objetivo común.
Como miembro del equipo, debes ser capaz de colaborar y llevarte bien con tus compañeros.
La colaboración ayuda a la creación de ideas, a la resolución de problemas y a la construcción de relaciones.
Cuando eres parte de un equipo remoto, el contacto con tus compañeros de equipo se limita porque están sentados a cientos o miles de kilómetros de ti.
Los equipos remotos también son menos propensos a tener múltiples experiencias de vinculación, debido a la naturaleza de un equipo distribuido.
Para que el teletrabajo funcione hay que colaborar, ya que permitirá que el equipo funcione de forma fluida.
Las empresas de creación de software suelen tener implantado el teletrabajo con equipos de varias personas. Reúnen personas en proyectos, mejorando la colaboración y la comunicación del equipo.
Comunicación social.
El teletrabajo puede ser extremadamente aislante, especialmente si un empleado está en una zona rural o es el único que trabaja en un puesto o proyecto específico.
Los expertos recomiendan contactar con compañeros de teletrabajo para comparar y compartir notas o conocimientos, obtener ayuda con proyectos y mantenerse al día con la cultura de la oficina.
Además, este aislamiento puede hacer que las habilidades de las personas se vean afectadas.
Los teletrabajadores deberían aprovechar todas las oportunidades de trabajo en red con otras personas.
Por ejemplo pueden explicar por zoom sus proyectos a clientes o compañeros de trabajo, es una manera de sociabilizar aunque sea de forma virtual.
Los trabajadores deberían dedicar más a tiempo a salir con la familia o los amigos para hacer ejercicio, comer, ver películas o realizar otras actividades divertidas u ociosas.
Habilidades en ofimática
Dado que el teletrabajo es tener la oficina en casa, se hace necesario manejar con soltura herramientas como una hoja de cálculo Excel, un procesador de texto como Word, programa de presentaciones como PowerPoint o programas para videoconferencias como Skype o Zoom.
También para dar a conocer nuestra trayectoria profesional y así poder acceder a más personas, la creación de un blog personal donde combinemos nuestros proyectos profesionales con ciertas habilidades comunicativas.
El manejo de nuestra herramienta de correo electrónico y ciertas normas de comunicación por internet como por ejemplo:
- No use todas las mayúsculas o signos de exclamación excesivos, recuerde que eso es equivalente a gritar.
- No utilice un lenguaje grosero por teléfono o por Internet, eso le hará parecer poco profesional.
Prevención en Riesgos Laborales.
El teletrabajo no está exento de ciertos riesgos laborales, sobre todo de componente emocional, es importante formar al teletrabajador para que no sufra sensaciones de estrés, asilamiento o desmotivación.
Pequeñas técnicas de gestión emocional y ejercicios de relajación puede ser muy buenas para que el trabajador tenga una óptima salud mental.
Algunas empresas americanas utilizan ya la técnica de meditación mindfulness para gestión de las emociones de sus teletrabajadores.
El teletrabajo puede llegar ocasionar sensación de aislamiento, es importante vigilar y tomar medidas preventivas en este punto.
Tampoco olvidar, si bien el trabajador permanece en su vivienda, los riesgos relacionados con ciertos virus, como ya el famoso COVID-19.
Es bueno, que tenga un protocolo de actuación para evitar posibles riesgos de contagio de virus cuando sale de su domicilio.
Herramientas de seguridad de los datos.
Al teletrabajar se manejan datos sensibles, tanto del trabajo como del ámbito personal, es importante conocer, al menos a nivel de usuario, el manejo de antivirus, así como la configuración de firewalls.
Antes de los confinamientos, el crecimiento del cibercrimen era bastante importante, a raíz de los acontecimientos vinculados con la pandemia, se han disparado exponencialmente los delitos informáticos.
Es importante que el trabajador tenga conocimiento de un protocolo de seguridad tanto para evitar posibles ataques o vulneraciones de su seguridad, como de posibles pérdidas de datos, el uso importante de una correcta realización de las copias de seguridad.
La cyberseguridad es uno de los aspectos más críticos que viviremos en los próximos años, tanto para pequeños profesionales como grandes organizaciones.
De hecho posiblemente no solo se convierta en un tema destacado en todos los foros de trabajo, sino muchos expertos auguran como una oportunidad de negocio en los próximos años, una estupenda oportunidad para dirigir nuestro perfil profesional hacia ese campo.